Description
Esta receta combina los beneficios del calabacín, que es bajo en calorías y rico en agua, con la proteína de los huevos y el sabor cremoso del queso. El resultado es un rollito de tortilla que puede ser servido en rodajas, convirtiéndose en una opción muy práctica tanto para un almuerzo ligero como para una cena rápida. Además, se puede servir tanto frío como caliente, lo que lo convierte en una opción muy versátil.
Ingredients
Scale
- 1 calabacín: Elige uno de tamaño mediano para obtener la cantidad perfecta de vegetales.
- 4 huevos: Aportan la estructura y la base proteica de la tortilla.
- 150 gramos de queso en lonchas: Puedes usar cualquier tipo de queso que derrita bien, como queso gouda, cheddar o mozzarella.
- Sal: Una pizca al gusto para sazonar.
- Aceite de oliva virgen extra: Para cocinar el calabacín y la tortilla, además de aportar un sabor característico.
Instructions
Paso 1: Preparar el calabacín
- Lavar y rallar el calabacín: Lava bien el calabacín, ya que lo utilizaremos con la piel. Rállalo completamente utilizando un rallador grueso.
- Escurrir el exceso de agua: El calabacín contiene mucha agua, por lo que es importante escurrirlo bien. Para ello, toma el calabacín rallado en tus manos y aprieta para eliminar la mayor cantidad posible de líquido. Esto evitará que la tortilla quede demasiado húmeda.
- Cocinar el calabacín: En una sartén grande, calienta un chorrito de aceite de oliva virgen extra a fuego medio. Añade el calabacín rallado y una pizca de sal. Cocina durante unos 5-7 minutos hasta que el calabacín esté suave, removiendo ocasionalmente.
Paso 2: Preparar la mezcla de la tortilla
- Batir los huevos: En un bol grande, bate los 4 huevos con una pizca de sal. Puedes ajustar la cantidad de sal al gusto.
- Incorporar el calabacín cocido: Añade el calabacín cocido a los huevos batidos y mezcla bien hasta que estén completamente integrados.
Paso 3: Cocinar la tortilla
- Verter la mezcla en la sartén: En una sartén antiadherente, calienta un poco de aceite de oliva a fuego medio. Vierte la mezcla de huevo y calabacín en la sartén.
- Cocinar la tortilla: Cocina removiendo ligeramente con una espátula hasta que la mezcla comience a cuajar. Esto tomará unos 3-4 minutos.
- Darle la vuelta: Una vez que la parte inferior esté dorada, da la vuelta a la tortilla con cuidado. Puedes ayudarte de un plato para facilitar este paso. Cocina otros 3-4 minutos hasta que la tortilla esté completamente cocida.
Paso 4: Preparar el rollito
- Enfriar ligeramente la tortilla: Retira la tortilla de la sartén y colócala sobre un papel de horno. Deja que se enfríe ligeramente para facilitar el manejo.
- Añadir las lonchas de queso: Coloca las lonchas de queso encima de la tortilla de manera uniforme, cubriendo toda la superficie.
- Enrrollar la tortilla: Con la ayuda del papel de horno, comienza a enrollar la tortilla sobre sí misma, formando un cilindro. Asegúrate de que el rollito quede bien apretado para que no se desarme al cortarlo.
- Reposar: Envuelve el rollito en el papel de horno y deja reposar durante unos minutos para que mantenga bien su forma.
Paso 5: Servir
- Cortar en rodajas: Una vez que el rollito ha reposado, retira el papel de horno y colócalo en una tabla de cortar. Utiliza un cuchillo afilado para cortar rodajas del grosor que prefieras.
- Servir caliente o frío: Puedes servir las rodajas de tortilla tanto calientes como frías, según tu preferencia.