Introducción
La tarta de queso Philadelphia con mermelada de fresa es un postre clásico y muy apreciado en muchas partes del mundo. Su combinación de una base crujiente de galletas, un relleno cremoso y suave de queso crema, y una capa brillante de mermelada de fresa la convierte en una opción perfecta para cualquier ocasión. Este postre es fácil de preparar y siempre es un éxito entre los amantes del dulce. Si estás buscando un postre que combine sabor, textura y simplicidad, esta tarta de queso es la elección ideal.
Resumen de la Receta
Esta receta se basa en tres componentes principales: una base de galleta, un relleno cremoso de queso crema, y una cobertura de mermelada de fresa. La base se hace triturando galletas tipo María y mezclándolas con mantequilla derretida, creando un fondo crujiente. El relleno de la tarta es suave y cremoso, hecho con queso crema, nata líquida y un toque de azúcar, y se estabiliza con gelatina. La cobertura de mermelada de fresa le añade un toque frutal y dulce que complementa a la perfección el sabor del queso.
Historia y Origen
La tarta de queso tiene sus raíces en la antigua Grecia, pero la versión moderna que conocemos hoy, especialmente popular en Estados Unidos y Europa, es el resultado de diversas adaptaciones y evoluciones de la receta original. La incorporación del queso crema, como el tipo Philadelphia, es una innovación relativamente reciente, popularizada en el siglo XX. La mermelada de fresa es una adición que aporta color y un contraste de sabores que se ha vuelto característico en muchas variantes de este postre.
Ingredientes
- 150 g de galletas tipo María
- 100 g de mantequilla
- 4 hojas de gelatina
- 400 ml de nata líquida para montar
- 80 g de azúcar
- 500 g de queso crema (tipo Philadelphia)
- 150 g de mermelada de fresa
Instrucciones
1. Preparar la Base de Galleta:
- Triturar las galletas: Comienza triturando 150 g de galletas tipo María hasta obtener un polvo fino. Puedes hacerlo en un procesador de alimentos o colocarlas en una bolsa y aplastarlas con un rodillo.
- Derretir la mantequilla: Derrite 100 g de mantequilla en el microondas o en una cazuela pequeña y deja enfriar un poco.
- Mezclar galletas y mantequilla: En un bol, mezcla el polvo de galleta con la mantequilla derretida hasta obtener una masa homogénea.
- Forrar el molde: Forra la base de un molde redondo desmoldable de 20 cm de diámetro con papel vegetal para facilitar el desmoldado posterior.
- Compactar la base: Presiona la mezcla de galleta y mantequilla en el fondo del molde con el fondo de un vaso o una cuchara, asegurándote de que quede uniforme y compacta.
- Refrigerar: Coloca la base en la nevera durante 30 minutos para que se endurezca.
2. Preparar el Relleno de Queso:
- Hidratar la gelatina: En un bol, hidrata 4 hojas de gelatina en agua fría durante 15 minutos.
- Calentar la nata y el azúcar: En una cazuela a fuego medio-alto, calienta 400 ml de nata líquida y 80 g de azúcar, mezclando constantemente hasta que la mezcla empiece a hervir.
- Añadir el queso crema: Reduce el fuego a medio y añade 500 g de queso crema a la cazuela. Remueve constantemente hasta que el queso esté completamente integrado, cocinando durante unos 5 minutos.
- Incorporar la gelatina: Retira la cazuela del fuego y deja que la mezcla se enfríe ligeramente. Luego, añade las hojas de gelatina bien escurridas y mezcla hasta que se disuelvan por completo.
- Enfriar: Deja que la mezcla de queso alcance la temperatura ambiente antes de usarla.
3. Montar la Tarta:
- Verter el relleno: Vierte la mezcla de queso sobre la base de galleta en el molde, asegurándote de que quede uniforme.
- Refrigerar: Coloca la tarta en el refrigerador durante un mínimo de 3 horas para que cuaje completamente.
4. Añadir la Cobertura:
- Cubrir con mermelada: Una vez que la tarta esté bien cuajada, extiende 150 g de mermelada de fresa sobre la superficie de la tarta, distribuyéndola de manera uniforme.
- Refrigerar nuevamente: Coloca la tarta en la nevera durante al menos 30 minutos más para que la mermelada se asiente.
5. Desmoldar y Servir:
- Desmoldar: Desmolda la tarta con cuidado, retirando el aro del molde y el papel vegetal. Transfiere la tarta a un plato de servir.
- Servir: Corta la tarta en porciones y disfruta de este delicioso postre.
Sugerencias para Servir y Maridaje
Guarniciones
La tarta de queso Philadelphia con mermelada de fresa se puede servir sola o acompañada de una bola de helado de vainilla para una experiencia aún más indulgente. También puedes decorarla con fresas frescas o una mezcla de frutos rojos para añadir un toque de frescura y color.
Bebidas
Este postre se marida perfectamente con un café espresso, un té de frutos rojos o un vaso de leche fría. Estas bebidas ayudan a equilibrar la riqueza del queso crema y la dulzura de la mermelada.
Variaciones de la Receta
- Tarta de Queso con Mermelada de Arándanos: Cambia la mermelada de fresa por mermelada de arándanos o cualquier otra fruta que prefieras.
- Tarta de Queso sin Gelatina: Si prefieres no usar gelatina, puedes sustituirla por agar-agar o simplemente dejar que la tarta cuaje más tiempo en el refrigerador, aunque la textura será ligeramente diferente.
- Tarta de Queso con Base de Chocolate: Para una versión más indulgente, añade cacao en polvo a la mezcla de galletas o utiliza galletas de chocolate.
Beneficios para la Salud
Aunque la tarta de queso Philadelphia es un postre indulgente, contiene algunos ingredientes que ofrecen beneficios nutricionales. El queso crema es una buena fuente de calcio, que es esencial para la salud ósea. Además, las fresas son ricas en vitamina C y antioxidantes. Para una versión más ligera, puedes optar por utilizar queso crema bajo en grasa y nata ligera.
Preguntas Frecuentes
¿Puedo utilizar otro tipo de galletas para la base?
Sí, puedes utilizar cualquier tipo de galleta que prefieras, como galletas Digestive o galletas de chocolate, para darle un sabor diferente a la base de la tarta.
¿Cómo puedo hacer que la tarta sea más ligera?
Para una versión más ligera, utiliza queso crema bajo en grasa y nata para montar baja en calorías. También puedes reducir la cantidad de azúcar o utilizar un edulcorante.
¿Cuánto tiempo dura la tarta en el refrigerador?
La tarta de queso Philadelphia puede durar hasta 3-4 días en el refrigerador si se almacena en un recipiente hermético.
¿Puedo congelar la tarta de queso?
Sí, puedes congelar la tarta de queso sin la mermelada de fresa. Una vez descongelada, añade la mermelada justo antes de servir.
Conclusión
La tarta de queso Philadelphia con mermelada de fresa es un postre clásico que nunca pasa de moda. Su combinación de texturas crujientes, cremosas y frutales la hace ideal para cualquier ocasión, ya sea una celebración especial o simplemente para disfrutar de un dulce capricho. Con su preparación sencilla y su sabor inigualable, este postre es una excelente opción para deleitar a tus invitados o para darte un gusto personal. ¡Anímate a prepararla y sorprende a todos con esta deliciosa tarta de queso!