Pollo en Salsa de la Abuela: Una Receta Tradicional para Disfrutar en Familia

Introducción: El pollo en salsa de la abuela es una receta clásica que ha pasado de generación en generación, manteniendo su lugar especial en las mesas familiares. Este plato combina el sabor del pollo campero con una salsa rica y aromática, elaborada con ingredientes sencillos pero llenos de sabor. Ideal para disfrutar en una comida familiar o para preparar con antelación y saborear al día siguiente, este guiso es un ejemplo perfecto de la cocina casera y reconfortante.

Visión General de la Receta: Este plato destaca por su simplicidad y riqueza de sabor. El pollo campero, que aporta una carne más sabrosa y jugosa, se cocina lentamente en una salsa elaborada a base de cebolla, ajo, zanahoria, laurel y especias como el tomillo y el orégano. La salsa se enriquece con caldo de pollo casero, lo que potencia su sabor, y un toque de vino blanco seco que se puede sustituir por vinagre de manzana para una versión sin alcohol. El resultado es un guiso de pollo con una salsa espesa y sabrosa, ideal para acompañar con un buen trozo de pan o unas patatas.

Historia y Origen: El pollo en salsa de la abuela es un ejemplo típico de la cocina casera española, que se caracteriza por el uso de ingredientes frescos y sencillos, y por la preparación de platos que requieren tiempo y paciencia. Esta receta es una versión clásica de los guisos de pollo que se preparaban en las zonas rurales de España, donde el uso de hierbas aromáticas y caldos caseros era común para realzar el sabor de los ingredientes principales. El plato ha evolucionado con el tiempo, pero sigue manteniendo su esencia y sabor auténtico, convirtiéndose en un favorito en muchas familias.

Ingredientes:

  • 30 ml de aceite de oliva virgen extra
  • 1 kg de pollo campero troceado
  • Sal al gusto
  • Pimienta negra molida al gusto
  • 2 cebollas tiernas
  • 2 dientes de ajo
  • 2 zanahorias
  • 1 hoja de laurel
  • 1 cucharadita de tomillo
  • 1 cucharadita de orégano
  • 1 cucharada de harina de trigo
  • 125 ml de vinagre de manzana (sustituto del vino blanco seco)
  • 350 ml de caldo de pollo casero

Instrucciones:

  1. Sellar el Pollo:
    • Calienta los 30 ml de aceite de oliva virgen extra en una cazuela a fuego fuerte.
    • Añade 1 kg de pollo campero troceado a la cazuela y sazónalo con sal y pimienta negra molida al gusto.
    • Cocina el pollo durante aproximadamente 5 minutos, asegurándote de dorarlo por todos sus lados. Una vez esté dorado, retíralo del fuego y resérvalo.
  2. Preparar el Sofrito:
    • Reduce la temperatura de la cazuela a fuego suave.
    • Corta las 2 cebollas tiernas en pluma (finas tiras) y los 2 dientes de ajo en camisa (sin pelar).
    • Pela las 2 zanahorias y córtalas en rodajas gruesas.
    • Añade las cebollas, el ajo, las zanahorias y la hoja de laurel a la cazuela. Salpimenta al gusto.
    • Sofríe los ingredientes durante unos 5 minutos, o hasta que la cebolla se vuelva transparente.
  3. Añadir las Especias y la Harina:
    • Una vez que las cebollas estén listas, agrega 1 cucharadita de tomillo y 1 cucharadita de orégano.
    • Incorpora 1 cucharada de harina de trigo, removiendo constantemente para que se integre y se cocine durante un par de minutos. Esto ayudará a espesar la salsa.
  4. Incorporar el Pollo y el Vinagre:
    • Vuelve a añadir el pollo dorado a la cazuela.
    • Vierte los 125 ml de vinagre de manzana (o el vino blanco seco si prefieres la receta original) y sube la temperatura del fuego para que el líquido se evapore un poco, durante aproximadamente 5 minutos.
  5. Cocinar a Fuego Lento:
    • Vierte 350 ml de caldo de pollo casero en la cazuela, asegurándote de que el pollo quede bien cubierto.
    • Una vez que el líquido comience a hervir, reduce el fuego a suave y cocina durante unos 35 minutos. Durante este tiempo, la salsa se reducirá y espesará, impregnando el pollo con todos los sabores.
  6. Reposar para Mejorar el Sabor:
    • Si es posible, deja que el guiso repose en la nevera durante al menos 12 horas antes de servirlo. Esto permitirá que los sabores se intensifiquen y que el plato esté aún más sabroso al día siguiente.

Consejos para Servir: Este plato se sirve tradicionalmente acompañado de pan crujiente para mojar en la deliciosa salsa. También puedes servirlo con arroz blanco, patatas asadas o una ensalada fresca para equilibrar la riqueza de la salsa.

Sugerencias de Maridaje: Para acompañar este pollo en salsa, te recomendamos una bebida ligera y refrescante como una limonada casera o una infusión de hierbas fría. Si prefieres una opción caliente, un té verde o una infusión de manzanilla complementarán bien los sabores del plato.

Variaciones de la Receta:

  • Pollo al Limón: Añade el zumo de un limón y su ralladura durante la cocción para darle un toque cítrico al plato.
  • Con Setas: Incorpora setas frescas al sofrito para añadir un sabor terroso y una textura adicional.
  • Estilo Mediterráneo: Agrega aceitunas verdes y pimientos rojos para una versión más mediterránea del guiso.

Beneficios para la Salud: El pollo es una excelente fuente de proteínas magras, que ayuda a mantener y reparar tejidos. Además, el uso de aceite de oliva virgen extra aporta grasas saludables que benefician al corazón. Las zanahorias y el ajo son ricos en antioxidantes y tienen propiedades antiinflamatorias. Este plato es una opción equilibrada y nutritiva para toda la familia.

FAQs:

  • ¿Puedo usar otro tipo de carne? Sí, puedes sustituir el pollo por pavo o conejo si prefieres una carne diferente.
  • ¿Puedo congelar este guiso? Sí, este plato se congela muy bien. Simplemente asegúrate de almacenarlo en un recipiente hermético y consúmelo en un plazo de 2-3 meses.
  • ¿Qué puedo usar si no tengo caldo de pollo casero? Puedes usar caldo de pollo envasado, pero si quieres mantener el sabor casero, puedes preparar un caldo rápido con agua, hierbas, y huesos de pollo.

Conclusión: El pollo en salsa de la abuela es una receta que encapsula el sabor y la tradición de la cocina casera española. Fácil de preparar y lleno de sabores reconfortantes, este guiso es perfecto para cualquier ocasión, ya sea una comida familiar o un plato preparado con antelación. Anímate a cocinarlo y disfruta de un pedazo de historia culinaria en tu mesa.

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