Paso 1: Precalentar el horno

Precalienta el horno a 180°C (350°F), asegurándote de que esté bien caliente para cuando vayas a introducir el postre. Este es un paso clave para garantizar que la leche asada se cocine de manera uniforme.

Paso 2: Preparar el caramelo

En una sartén pequeña, derrite la taza de azúcar a fuego medio, sin añadir agua ni mover en exceso para evitar que se cristalice. Deja que el azúcar se derrita lentamente hasta que se convierta en un caramelo dorado y ligeramente ámbar. Una vez que el caramelo esté listo, viértelo rápidamente en el fondo de un molde para flan o en un molde para hornear, asegurándote de cubrir uniformemente toda la base antes de que el caramelo se endurezca.

Consejo: Manipula el caramelo con cuidado, ya que puede quemarse fácilmente si lo dejas demasiado tiempo en el fuego. No te preocupes si se endurece rápidamente en el molde, ya que al hornear, el calor lo volverá a suavizar.

Paso 3: Preparar la mezcla de leche

En un bol grande, bate los 5 huevos hasta que estén bien integrados. Luego, añade la lata de leche condensada y sigue batiendo hasta que se mezclen completamente.

A continuación, incorpora la leche evaporada, la leche entera, y la esencia de vainilla. Bate bien hasta que todos los ingredientes estén completamente integrados. Es importante que la mezcla quede homogénea y sin grumos.

Paso 4: Verter la mezcla en el molde

Vierte la mezcla de leche y huevos sobre el caramelo endurecido en el molde. Llena hasta casi el borde, dejando un pequeño espacio para evitar que la mezcla se derrame mientras se hornea.

Paso 5: Cocinar al baño maría

Coloca el molde con la mezcla en un recipiente más grande. Llena este recipiente con agua caliente hasta cubrir aproximadamente la mitad del molde de la leche asada. Este método de baño maría es crucial para que el postre se cocine lentamente y de manera uniforme, evitando que se formen burbujas o grietas en la superficie.

Paso 6: Hornear

Hornea la leche asada durante 45-50 minutos, o hasta que al insertar un palillo en el centro, este salga limpio. Durante la cocción, el postre se irá dorando ligeramente en la parte superior, lo que le dará su característica textura firme.

Consejo: Si notas que la parte superior del postre se está dorando demasiado rápido, puedes cubrirlo ligeramente con papel de aluminio para evitar que se queme.

Paso 7: Dejar enfriar

Una vez que la leche asada esté completamente cocida, retírala del horno y déjala enfriar a temperatura ambiente. Luego, refrigera el postre por al menos 2 horas antes de desmoldarlo. Esto ayudará a que se compacte y tenga una textura firme pero cremosa.

Paso 8: Desmoldar y servir

Cuando esté completamente frío, pasa un cuchillo fino por el borde del molde para despegar la leche asada. Coloca un plato grande sobre el molde y, con cuidado, voltea el postre sobre el plato. El caramelo caerá sobre la leche asada, creando una deliciosa cobertura.