Leche Asada con Leche Condensada

Introducción

La leche asada es un postre tradicional de América Latina que destaca por su sencillez y sabor suave. Este postre, que recuerda al flan, se caracteriza por una textura cremosa y un sabor dulce que proviene de la leche condensada y el caramelo. La leche asada con leche condensada es ideal para aquellos que disfrutan de postres lácteos con un toque de caramelo, ya que el contraste entre la suavidad de la crema y el dulzor del caramelo es irresistible. Con ingredientes que probablemente ya tienes en casa, este postre es una excelente opción para sorprender a la familia o los invitados.

En esta receta, te guiaremos a través del proceso paso a paso para que puedas preparar una leche asada perfecta, con un dorado caramelo y una consistencia cremosa que se derrite en la boca.

Descripción General de la Receta

La leche asada es un postre a base de leche, huevos y azúcar, que se cocina al horno hasta obtener una textura firme y suave. Se prepara en un molde con una capa de caramelo en la base, similar a un flan, pero con una textura un poco más densa debido a su método de cocción directo al horno. La leche condensada añade una riqueza extra y un dulzor irresistible que complementa a la perfección el caramelo.

Este postre se suele preparar en un baño maría en el horno para asegurar que se cocine de manera uniforme y sin agrietarse. Es fácil de hacer y tiene un proceso de cocción que, aunque toma un poco de tiempo, no requiere mucha atención constante.

Historia y Origen

La leche asada tiene sus raíces en la cocina de muchos países latinoamericanos, especialmente en Chile, Perú y Colombia. Este postre ha sido una opción popular en hogares y restaurantes por su simplicidad y sus ingredientes básicos que siempre están disponibles. A diferencia del flan, la leche asada no tiene una textura tan suave, sino que es un poco más firme debido a que se cocina directamente en el horno, sin cubrir, lo que le da una superficie ligeramente dorada y crocante.

La versión con leche condensada es una variación moderna que le aporta una mayor cremosidad y un sabor más dulce. La leche condensada es un ingrediente que ha ganado popularidad en los postres caseros de toda América Latina, ya que añade una textura rica y un dulzor característico.

Ingredientes

Para preparar este delicioso postre, necesitarás los siguientes ingredientes:

• 1 taza de leche evaporada: Aporta una textura rica y cremosa.
• 1 taza de leche entera: Complementa la leche evaporada y suaviza el sabor.
• 5 huevos: Los huevos son fundamentales para darle estructura y cuerpo a la leche asada.
• 1 lata (397 g) de leche condensada: Añade dulzura y cremosidad.
• 1 cucharadita de esencia de vainilla: Da un toque aromático y complementa el sabor dulce.
• 1 taza de azúcar: Para hacer el caramelo.

Notas sobre los Ingredientes:

• Leche evaporada: Tiene una textura más densa que la leche entera, lo que aporta una riqueza adicional al postre.
• Leche condensada: Aporta no solo dulzor, sino también una cremosidad irresistible.
• Huevos: Es importante batir bien los huevos para asegurarse de que el postre tenga una textura suave y no forme grumos.

Instrucciones

Paso 1: Precalentar el horno

Precalienta el horno a 180°C (350°F), asegurándote de que esté bien caliente para cuando vayas a introducir el postre. Este es un paso clave para garantizar que la leche asada se cocine de manera uniforme.

Paso 2: Preparar el caramelo

En una sartén pequeña, derrite la taza de azúcar a fuego medio, sin añadir agua ni mover en exceso para evitar que se cristalice. Deja que el azúcar se derrita lentamente hasta que se convierta en un caramelo dorado y ligeramente ámbar. Una vez que el caramelo esté listo, viértelo rápidamente en el fondo de un molde para flan o en un molde para hornear, asegurándote de cubrir uniformemente toda la base antes de que el caramelo se endurezca.

Consejo: Manipula el caramelo con cuidado, ya que puede quemarse fácilmente si lo dejas demasiado tiempo en el fuego. No te preocupes si se endurece rápidamente en el molde, ya que al hornear, el calor lo volverá a suavizar.

Paso 3: Preparar la mezcla de leche

En un bol grande, bate los 5 huevos hasta que estén bien integrados. Luego, añade la lata de leche condensada y sigue batiendo hasta que se mezclen completamente.

A continuación, incorpora la leche evaporada, la leche entera, y la esencia de vainilla. Bate bien hasta que todos los ingredientes estén completamente integrados. Es importante que la mezcla quede homogénea y sin grumos.

Paso 4: Verter la mezcla en el molde

Vierte la mezcla de leche y huevos sobre el caramelo endurecido en el molde. Llena hasta casi el borde, dejando un pequeño espacio para evitar que la mezcla se derrame mientras se hornea.

Paso 5: Cocinar al baño maría

Coloca el molde con la mezcla en un recipiente más grande. Llena este recipiente con agua caliente hasta cubrir aproximadamente la mitad del molde de la leche asada. Este método de baño maría es crucial para que el postre se cocine lentamente y de manera uniforme, evitando que se formen burbujas o grietas en la superficie.

Paso 6: Hornear

Hornea la leche asada durante 45-50 minutos, o hasta que al insertar un palillo en el centro, este salga limpio. Durante la cocción, el postre se irá dorando ligeramente en la parte superior, lo que le dará su característica textura firme.

Consejo: Si notas que la parte superior del postre se está dorando demasiado rápido, puedes cubrirlo ligeramente con papel de aluminio para evitar que se queme.

Paso 7: Dejar enfriar

Una vez que la leche asada esté completamente cocida, retírala del horno y déjala enfriar a temperatura ambiente. Luego, refrigera el postre por al menos 2 horas antes de desmoldarlo. Esto ayudará a que se compacte y tenga una textura firme pero cremosa.

Paso 8: Desmoldar y servir

Cuando esté completamente frío, pasa un cuchillo fino por el borde del molde para despegar la leche asada. Coloca un plato grande sobre el molde y, con cuidado, voltea el postre sobre el plato. El caramelo caerá sobre la leche asada, creando una deliciosa cobertura.

Sugerencias para Acompañar y Servir

• Con frutas frescas: Sirve la leche asada con un acompañamiento de frutas frescas como fresas, moras o rodajas de kiwi para añadir un toque de frescura y color al plato.
• Con crema batida: Una porción de crema batida ligera puede añadir un contraste agradable a la textura cremosa del postre.
• Con una taza de café o té: Este postre es perfecto para acompañar una merienda o después de una comida, junto con una bebida caliente.

Variaciones de la Receta

• Leche asada de coco: Añade 1/2 taza de leche de coco a la mezcla de leche para un toque tropical.
• Leche asada con ralladura de limón: Agrega una cucharadita de ralladura de limón a la mezcla para darle un toque cítrico y fresco.
• Leche asada al chocolate: Incorpora 2 cucharadas de cacao en polvo a la mezcla de leche para crear una versión chocolatera de este postre.

Beneficios para la Salud

Aunque la leche asada con leche condensada es un postre dulce y algo indulgente, contiene algunos ingredientes que aportan beneficios nutricionales. Los huevos son una excelente fuente de proteínas y vitaminas del grupo B, esenciales para el buen funcionamiento del cuerpo. La leche aporta calcio, que es fundamental para la salud ósea. Sin embargo, debido a su alto contenido en azúcar y grasas, es recomendable consumir este postre con moderación dentro de una dieta equilibrada.

Preguntas Frecuentes

¿Puedo usar solo leche evaporada en lugar de leche entera?

Sí, puedes sustituir la leche entera por más leche evaporada, pero esto hará que la textura sea un poco más rica y densa.

¿Cómo puedo evitar que se formen burbujas en la leche asada?

Para evitar burbujas, asegúrate de no batir en exceso la mezcla. También es importante cocinar el postre a una temperatura constante y moderada.

¿Cuánto tiempo se conserva la leche asada?

La leche asada puede conservarse en el refrigerador durante 3-4 días en un recipiente hermético. Es ideal servirla fría o a temperatura ambiente.

Conclusión

La leche asada con leche condensada es un postre clásico que combina la suavidad de la leche y los huevos con el dulzor del caramelo. Su sencillez lo convierte en una opción perfecta para cualquier ocasión, y su versatilidad te permite experimentar con diferentes sabores y acompañamientos. Este postre, que es fácil de preparar, seguramente se convertirá en uno de tus favoritos para compartir con la familia o amigos.

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