Introducción:
Las facturas con crema pastelera son un clásico de la repostería, especialmente populares en Argentina y Uruguay. Estas piezas de pan dulce, suaves y esponjosas, están rellenas con una exquisita crema pastelera, que les otorga un sabor irresistible. Ideales para acompañar con una taza de café o té en el desayuno o la merienda, estas facturas caseras son fáciles de preparar y deleitan a grandes y pequeños.
Descripción General de la Receta:
La receta de facturas con crema pastelera combina una masa suave y ligeramente dulce con un relleno cremoso de crema pastelera. La masa se prepara con ingredientes básicos como harina, huevo, leche y manteca, mientras que la crema pastelera se elabora con yemas de huevo, leche y azúcar. La clave está en lograr una masa bien leudada y una crema perfectamente espesa. A continuación, te guiaré paso a paso para que puedas disfrutar de estas deliciosas facturas en la comodidad de tu hogar.
Historia y Origen:
Las facturas son una parte importante de la tradición panadera en varios países de América Latina, particularmente en Argentina, donde se las consume como parte del desayuno o merienda. El término “facturas” se refiere a una variedad de panes dulces y salados, y muchas de las recetas originales llegaron a Argentina a través de inmigrantes europeos, principalmente de Italia y España, a finales del siglo XIX. La combinación con crema pastelera proviene de la influencia francesa en la repostería, que introdujo el uso de esta crema suave y deliciosa como relleno para diferentes postres y panes.
Ingredientes:
Para la masa de facturas:
- 250 ml de leche tibia
- 100 g de azúcar
- 10 g de sal
- 500 g de harina de trigo 0000
- 25 g de levadura fresca o 10 g de levadura seca
- 1 huevo
- 100 g de manteca derretida
- 1 cucharadita de esencia de vainilla
Para la crema pastelera:
- 500 ml de leche
- 100 g de azúcar
- 4 yemas de huevo
- 40 g de maicena (fécula de maíz)
- 1 cucharadita de esencia de vainilla
Instrucciones:
Preparación de la Crema Pastelera:
- Calentar la leche: En una olla mediana, calienta los 500 ml de leche a fuego medio hasta que esté tibia, pero sin llegar a hervir. Esto es importante para que la crema pastelera no se corte.
- Mezclar yemas, azúcar y maicena: En un bol aparte, bate las 4 yemas de huevo junto con los 100 g de azúcar hasta obtener una mezcla homogénea. A continuación, agrega los 40 g de maicena y mezcla bien hasta que no queden grumos.
- Incorporar la leche: Poco a poco, vierte la leche tibia sobre la mezcla de yemas, batiendo constantemente para evitar que se formen grumos.
- Espesar la crema: Vierte nuevamente la mezcla en la olla y cocina a fuego bajo, revolviendo constantemente con una cuchara de madera o una espátula. La mezcla comenzará a espesar después de unos minutos. Sigue revolviendo hasta que la crema tenga una consistencia suave y espesa.
- Añadir esencia de vainilla: Retira la crema del fuego y añade la cucharadita de esencia de vainilla, mezclando bien.
- Enfriar la crema: Transfiere la crema a un bol y cúbrela con papel film, asegurándote de que el plástico esté en contacto directo con la superficie de la crema para evitar que se forme una capa dura. Deja que la crema se enfríe completamente antes de usarla.
Preparación de la Masa:
- Activar la levadura: En un recipiente pequeño, disuelve los 25 g de levadura fresca (o 10 g de levadura seca) en los 250 ml de leche tibia, junto con una cucharadita de azúcar. Deja reposar la mezcla durante unos 10 minutos o hasta que se forme una espuma en la superficie, lo que indica que la levadura está activada.
- Mezclar los ingredientes secos: En un bol grande, mezcla los 500 g de harina de trigo 0000, los 100 g de azúcar y los 10 g de sal. Haz un hueco en el centro para añadir los ingredientes líquidos.
- Incorporar los líquidos: En el hueco de la mezcla de harina, añade el huevo, la esencia de vainilla, la manteca derretida y la levadura activada. Mezcla bien con una cuchara de madera hasta que se forme una masa pegajosa.
- Amasar: Vuelca la masa sobre una superficie ligeramente enharinada y amasa durante unos 10 minutos, hasta que la masa esté suave, elástica y no se pegue tanto a las manos. Si es necesario, puedes espolvorear un poco más de harina, pero evita usar demasiada para no endurecer la masa.
- Dejar leudar: Coloca la masa en un bol ligeramente engrasado, cúbrela con un paño limpio y deja reposar en un lugar cálido durante aproximadamente 1 hora, o hasta que la masa haya doblado su tamaño.
Formación de las Facturas:
- Estirar la masa: Una vez que la masa haya leudado, colócala sobre una superficie ligeramente enharinada y estírala con un rodillo hasta que tenga aproximadamente 1 cm de grosor.
- Cortar y formar: Corta la masa en tiras o cuadrados, dependiendo de la forma que desees para las facturas. Puedes darles forma de medialunas (croissants) o de pequeños rollos, según tu preferencia.
- Rellenar con crema pastelera: Haz pequeños cortes o hendiduras en las facturas y rellénalas con la crema pastelera fría que preparaste anteriormente. Utiliza una manga pastelera o una cuchara pequeña para facilitar este paso.
- Segundo levado: Coloca las facturas en una bandeja para hornear cubierta con papel pergamino. Cúbrelas con un paño limpio y deja que leuden nuevamente durante unos 30 minutos.
Horneado:
- Precalentar el horno: Mientras las facturas están en su segundo levado, precalienta el horno a 180°C (350°F).
- Hornear: Una vez que las facturas hayan leudado nuevamente, hornea durante unos 15-20 minutos o hasta que estén doradas en la superficie.
- Enfriar: Retira las facturas del horno y déjalas enfriar sobre una rejilla antes de servir.
Sugerencias para Servir y Maridar:
Las facturas con crema pastelera son perfectas para servir en el desayuno o la merienda, acompañadas de una taza de café, té o mate. También puedes espolvorear azúcar glas por encima para darles un toque decorativo o bañarlas ligeramente con almíbar para que brillen más.
Variaciones de la Receta:
- Facturas de dulce de leche: Además de la crema pastelera, puedes rellenar algunas de las facturas con dulce de leche para obtener una variación igualmente deliciosa.
- Facturas de manzana: Rellena las facturas con un poco de puré de manzana y canela para una opción más frutal.
- Facturas con crema y fruta: Coloca una pequeña rodaja de fruta, como duraznos o fresas, sobre la crema pastelera antes de hornear para darle un toque fresco.
Beneficios para la Salud:
Si bien las facturas son una opción indulgente, se pueden hacer versiones más saludables. Por ejemplo, puedes reducir el azúcar o sustituirla por alternativas naturales como la miel o el azúcar de coco. Además, la masa se puede hacer con harina integral para añadir más fibra. La crema pastelera también puede ser adaptada con leche descremada o bebidas vegetales.
Preguntas Frecuentes (FAQs):
1. ¿Puedo congelar las facturas?
Sí, las facturas se pueden congelar una vez que están cocidas. Solo asegúrate de guardarlas en un recipiente hermético. Cuando quieras consumirlas, simplemente descongélalas a temperatura ambiente o caliéntalas en el horno.
2. ¿Cómo puedo evitar que la masa quede dura?
Es importante no añadir demasiada harina al amasar y asegurarte de que la masa esté bien hidratada. Además, el tiempo de levado es clave para obtener una masa suave y esponjosa.
3. ¿Qué otro tipo de rellenos puedo usar?
Además de la crema pastelera, puedes experimentar con mermeladas, dulce de leche o cremas de chocolate para diversificar tus facturas.
Conclusión:
Las facturas fáciles con crema pastelera son una opción deliciosa para quienes disfrutan de la panadería casera. Con una masa suave y un relleno cremoso, este clásico de la repostería es ideal para compartir en familia o con amigos durante un desayuno o merienda. La receta es sencilla, y con un poco de práctica, podrás lograr facturas esponjosas y llenas de sabor.
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Facturas Fáciles con Crema Pastelera: Una Delicia Clásica de la Panadería
Ingredients
Para la masa de facturas:
- 250 ml de leche tibia
- 100 g de azúcar
- 10 g de sal
- 500 g de harina de trigo 0000
- 25 g de levadura fresca o 10 g de levadura seca
- 1 huevo
- 100 g de manteca derretida
- 1 cucharadita de esencia de vainilla
Para la crema pastelera:
- 500 ml de leche
- 100 g de azúcar
- 4 yemas de huevo
- 40 g de maicena (fécula de maíz)
- 1 cucharadita de esencia de vainilla
Instructions
Preparación de la Crema Pastelera:
- Calentar la leche: En una olla mediana, calienta los 500 ml de leche a fuego medio hasta que esté tibia, pero sin llegar a hervir. Esto es importante para que la crema pastelera no se corte.
- Mezclar yemas, azúcar y maicena: En un bol aparte, bate las 4 yemas de huevo junto con los 100 g de azúcar hasta obtener una mezcla homogénea. A continuación, agrega los 40 g de maicena y mezcla bien hasta que no queden grumos.
- Incorporar la leche: Poco a poco, vierte la leche tibia sobre la mezcla de yemas, batiendo constantemente para evitar que se formen grumos.
- Espesar la crema: Vierte nuevamente la mezcla en la olla y cocina a fuego bajo, revolviendo constantemente con una cuchara de madera o una espátula. La mezcla comenzará a espesar después de unos minutos. Sigue revolviendo hasta que la crema tenga una consistencia suave y espesa.
- Añadir esencia de vainilla: Retira la crema del fuego y añade la cucharadita de esencia de vainilla, mezclando bien.
- Enfriar la crema: Transfiere la crema a un bol y cúbrela con papel film, asegurándote de que el plástico esté en contacto directo con la superficie de la crema para evitar que se forme una capa dura. Deja que la crema se enfríe completamente antes de usarla.
Preparación de la Masa:
- Activar la levadura: En un recipiente pequeño, disuelve los 25 g de levadura fresca (o 10 g de levadura seca) en los 250 ml de leche tibia, junto con una cucharadita de azúcar. Deja reposar la mezcla durante unos 10 minutos o hasta que se forme una espuma en la superficie, lo que indica que la levadura está activada.
- Mezclar los ingredientes secos: En un bol grande, mezcla los 500 g de harina de trigo 0000, los 100 g de azúcar y los 10 g de sal. Haz un hueco en el centro para añadir los ingredientes líquidos.
- Incorporar los líquidos: En el hueco de la mezcla de harina, añade el huevo, la esencia de vainilla, la manteca derretida y la levadura activada. Mezcla bien con una cuchara de madera hasta que se forme una masa pegajosa.
- Amasar: Vuelca la masa sobre una superficie ligeramente enharinada y amasa durante unos 10 minutos, hasta que la masa esté suave, elástica y no se pegue tanto a las manos. Si es necesario, puedes espolvorear un poco más de harina, pero evita usar demasiada para no endurecer la masa.
- Dejar leudar: Coloca la masa en un bol ligeramente engrasado, cúbrela con un paño limpio y deja reposar en un lugar cálido durante aproximadamente 1 hora, o hasta que la masa haya doblado su tamaño.