Description
Este plato consiste en tiras de pechuga de pollo rebozadas y fritas hasta lograr una textura dorada y crujiente. Lo que realmente realza esta receta es la salsa de mostaza y miel, que aporta el equilibrio perfecto entre lo dulce y lo ácido, complementando maravillosamente el sabor del pollo. En conjunto, ofrece una opción deliciosa y versátil que puede servirse como aperitivo o como plato principal.
Ingredients
Scale
Para los dedos de pollo:
- 500 gramos de pechugas de pollo en tiras
- 1 taza de pan rallado
- 1/2 taza de harina
- 2 huevos
- 1 cucharadita de sal
- 1 cucharadita de pimienta
- Aceite para freír
Para la salsa de mostaza y miel:
- 1/4 taza de mostaza
- 2 cucharadas de miel
- 1 cucharadita de jugo de limón
Instructions
Preparación del pollo
- Preparar el rebozado del pollo: En un tazón mediano, mezcla la harina, la sal y la pimienta. En otro tazón separado, bate los huevos hasta que estén bien mezclados.
- Rebozar las tiras de pollo: Pasa cada tira de pechuga de pollo primero por la mezcla de harina, asegurándote de cubrir bien. Luego, pásalas por el huevo batido, y finalmente, cúbrelas con pan rallado. Es importante que el pan rallado cubra de manera uniforme todas las tiras para lograr una textura crujiente al freírlas.
Freír las tiras de pollo
- Freír el pollo: En una sartén grande, calienta suficiente aceite a fuego medio-alto. Cuando el aceite esté caliente (puedes probarlo sumergiendo una pequeña migaja de pan rallado; si chisporrotea, está listo), coloca las tiras de pollo en la sartén. Fríe durante aproximadamente 4-5 minutos por cada lado, o hasta que estén doradas y crujientes. Retira las tiras y colócalas en un plato cubierto con papel absorbente para eliminar el exceso de aceite.
Preparación de la salsa
- Hacer la salsa de mostaza y miel: En un tazón pequeño, mezcla la mostaza, la miel y el jugo de limón hasta que los ingredientes estén bien combinados. La consistencia debe ser suave, y el sabor equilibrado entre lo dulce y lo picante.
Servir
- Presentación: Coloca los dedos de pollo en un plato y sírvelos acompañados de la salsa de mostaza y miel en un tazón pequeño a un lado. Puedes decorar con hierbas frescas como perejil o cilantro si lo deseas