1. Preparar el Aceite

• Calentar el aceite: Comienza calentando los 250 ml de aceite de oliva virgen extra en una cazuela amplia a fuego medio. Es importante que la cazuela tenga suficiente espacio para que los trozos de pavo se cocinen sin amontonarse.
• Preparar los ajos: Pela los 3 dientes de ajo y córtalos en rodajas finas. Esto permitirá que liberen su sabor de manera uniforme en el aceite.
• Cocinar los ajos: Añade las rodajas de ajo a la cazuela con el aceite caliente. Cocina durante aproximadamente 3 minutos, o hasta que los ajos empiecen a dorarse ligeramente, pero sin quemarse.
• Agregar la cayena: Añade la cayena o guindilla entera (o cortada en trozos si prefieres un toque más picante) y cocina durante 2 minutos más. Esto infundirá el aceite con un ligero toque de picante.
• Retirar del fuego: Una vez dorados los ajos y cocinada la cayena, retíralos del aceite con una espumadera y resérvalos para más tarde.

2. Cocinar los Lomos de Pavo

• Enfriar el aceite: Deja que el aceite se enfríe ligeramente antes de añadir los lomos de pavo. Esto es crucial para evitar que el pavo se cocine demasiado rápido o se queme.
• Añadir los lomos: Coloca los 4 trozos de pavo en la cazuela, con la piel hacia arriba. Esto permitirá que la piel del pavo libere su gelatina natural, lo que ayudará a formar la salsa.
• Cocción suave: Cocina a fuego muy suave durante unos 5 minutos, permitiendo que el pavo se cocine lentamente y comience a liberar su jugo en el aceite.

3. Formar la Salsa Pil Pil

• Subir ligeramente el fuego: Una vez que el pavo ha cocinado suavemente, sube un poco el fuego, pero manténlo a nivel medio para evitar que el aceite se caliente demasiado.
• Agregar los ajos y la cayena: Vuelve a incorporar las rodajas de ajo y la cayena al aceite.
• Emulsionar la salsa: Este es el paso más importante. Comienza a mover la cazuela en movimientos circulares constantes, sin remover directamente el pavo. Este movimiento ayudará a que la gelatina del pavo se emulsione con el aceite, creando la característica salsa pil pil. Este proceso puede tomar entre 10 y 20 minutos, dependiendo de la cantidad de gelatina que suelte el pavo y la temperatura del aceite.
• Observar la consistencia: Sabes que la salsa está lista cuando adquiere una textura suave y ligeramente espesa.

4. Servir

• Montar el plato: Coloca los lomos de pavo en un plato y vierte la salsa pil pil por encima, asegurándote de que estén bien cubiertos.
• Decorar con los ajos: Finalmente, utiliza las rodajas de ajo fritas como decoración sobre los lomos de pavo. Esto no solo añadirá un toque visual, sino también una textura crujiente y un sabor extra.