Ingredients
Scale
- 2 cebollas grandes
- 1 taza de harina de trigo
- 1/2 taza de maicena
- 1 cucharadita de polvo de hornear
- 1 taza de cerveza (o agua con gas para una opción sin alcohol)
- 1 huevo
- 1 taza de pan rallado (opcional: panko para un acabado más crujiente)
- Aceite para freír (vegetal o de girasol)
- Sal y pimienta al gusto
Instructions
1. Preparar las cebollas:
- Pela las cebollas y córtalas en aros de aproximadamente 1 cm de grosor.
- Separa con cuidado los aros entre sí para que queden individuales.
- Coloca los aros de cebolla en un bol con agua fría y déjalos reposar durante unos 10 minutos. Este paso ayuda a suavizar el fuerte sabor de la cebolla cruda.
- Luego, escurre los aros de cebolla y sécalos bien con papel absorbente antes de continuar con el siguiente paso.
2. Preparar la mezcla húmeda:
- En un bol grande, mezcla la harina de trigo, la maicena y el polvo de hornear.
- En otro recipiente, bate ligeramente el huevo.
- Agrega el huevo batido y la cerveza (o agua con gas) a la mezcla seca, vertiéndola poco a poco mientras bates. La masa debe tener una consistencia suave y sin grumos, similar a la de la masa de panqueques.
- Sazona la mezcla con sal y pimienta al gusto.
3. Empanar los aros de cebolla:
- Asegúrate de que los aros de cebolla estén bien secos después del remojo en agua.
- Sumerge los aros de cebolla, uno por uno, en la mezcla húmeda, asegurándote de que queden bien cubiertos por todos lados.
- Luego, si deseas un acabado más crujiente, pásalos por pan rallado o panko para obtener una capa extra crujiente. Asegúrate de que el pan rallado o el panko se adhiera bien a cada aro.
4. Freír:
- Calienta suficiente aceite en una sartén profunda o una freidora a 180 °C. Es importante que el aceite esté a la temperatura correcta para lograr que los aros se cocinen de manera uniforme y queden dorados y crujientes.
- Fríe los aros de cebolla en pequeñas tandas para evitar que se amontonen y se enfríe el aceite.
- Cocina los aros durante 2-3 minutos o hasta que estén dorados y crujientes.
- Retira los aros de cebolla del aceite con una espumadera y colócalos sobre papel absorbente para eliminar el exceso de grasa.
5. Servir:
- Espolvorea los aros de cebolla recién fritos con un poco más de sal si lo deseas.
- Sirve inmediatamente acompañados de tus salsas favoritas, como mayonesa, ketchup, salsa barbacoa, alioli o incluso una salsa picante para los más atrevidos.