Albóndigas en Salsa de Cebolla: Receta Tradicional y Deliciosa

Introducción:

Las albóndigas en salsa de cebolla son un plato clásico que ha pasado de generación en generación en muchas cocinas del mundo. Esta receta combina la jugosidad de las albóndigas con el sabor profundo y dulce de una salsa de cebolla caramelizada. Ideal para acompañar con puré de papas o arroz, es un plato perfecto para disfrutar en familia o en una cena especial. A continuación, te presentamos todos los detalles sobre esta receta, desde su historia hasta los pasos detallados para su preparación.

Resumen de la Receta:

Las albóndigas en salsa de cebolla son una deliciosa combinación de albóndigas doradas, hechas de carne molida sazonada con ajo, perejil y especias, bañadas en una salsa rica de cebolla caramelizada. La receta incluye ingredientes simples y fácilmente accesibles, pero con una técnica que asegura un resultado lleno de sabor. Es un plato que se prepara en dos partes: primero, se cocinan las albóndigas y luego se prepara la salsa de cebolla en la misma sartén para aprovechar todos los sabores.

Historia y Origen:

El origen de las albóndigas se remonta a las antiguas cocinas del Medio Oriente, donde ya se preparaban platos similares. Con el tiempo, las albóndigas viajaron a través de Europa, adaptándose a las tradiciones culinarias de cada región. En España, por ejemplo, las albóndigas son una parte importante de la gastronomía, a menudo servidas en guisos o salsas. La combinación con una salsa de cebolla caramelizada es un clásico de la cocina casera que se ha mantenido como una opción reconfortante en muchas mesas. En este caso, la sencillez de los ingredientes es la clave del éxito de este plato.

Ingredientes:

Para las albóndigas:

  • 1/2 cucharadita de sal
  • 1 huevo
  • 1/2 taza de pan rallado
  • 500 g de carne molida (puedes usar carne de res, carne de pollo o una mezcla de ambas)
  • 2 dientes de ajo, picados finamente
  • 1/4 taza de perejil fresco, picado
  • 1/2 cucharadita de pimienta negra molida
  • 1/2 cucharadita de orégano seco
  • 2 cucharadas de aceite de oliva para freír las albóndigas

Para la salsa de cebolla:

  • 2 cebollas grandes, cortadas en rodajas finas
  • 2 cucharadas de mantequilla
  • 2 cucharadas de harina de trigo
  • 2 tazas de caldo de res (o caldo de pollo si prefieres un sabor más suave)
  • 1 hoja de laurel
  • Sal y pimienta al gusto

Instrucciones Paso a Paso:

Preparación de las albóndigas:

  1. Mezcla de la carne:
    • En un bol grande, coloca la carne molida de res o pollo (o una mezcla de ambas) y añade el huevo, el pan rallado, el ajo picado, el perejil fresco, la sal, la pimienta y el orégano.
    • Con las manos o una espátula, mezcla bien todos los ingredientes hasta que estén bien integrados. Es importante no mezclar en exceso para evitar que las albóndigas queden demasiado compactas.
  2. Formación de las albóndigas:
    • Con las manos ligeramente húmedas para que no se pegue la mezcla, forma pequeñas albóndigas del tamaño que prefieras. Generalmente, un tamaño de aproximadamente 3-4 cm de diámetro es ideal para que se cocinen de manera uniforme.
  3. Cocción inicial de las albóndigas:
    • En una sartén grande, calienta las 2 cucharadas de aceite de oliva a fuego medio-alto.
    • Coloca las albóndigas en la sartén y dora por todos lados, girándolas suavemente para asegurarte de que estén bien doradas y selladas por fuera. Este proceso debería tardar unos 7-10 minutos.
    • Una vez doradas, retíralas de la sartén y resérvalas en un plato.

Preparación de la salsa de cebolla:

  1. Cebolla caramelizada:
    • En la misma sartén en la que doraste las albóndigas (sin limpiarla para aprovechar los jugos y restos de la carne), derrite las 2 cucharadas de mantequilla a fuego medio.
    • Añade las cebollas cortadas en rodajas finas y cocínalas a fuego lento, removiendo de vez en cuando, durante unos 10-15 minutos. Las cebollas deben volverse suaves, doradas y caramelizadas. Este paso es crucial para lograr el sabor dulce y profundo de la salsa.
  2. Preparación de la salsa:
    • Una vez que las cebollas estén bien caramelizadas, añade las 2 cucharadas de harina de trigo y remueve constantemente durante unos 2 minutos. La harina ayudará a espesar la salsa.
    • Gradualmente, incorpora las 2 tazas de caldo de res o pollo, removiendo mientras lo haces para evitar que se formen grumos.
    • Añade la hoja de laurel y ajusta con sal y pimienta al gusto.
    • Cocina a fuego lento durante unos 10 minutos, o hasta que la salsa haya espesado ligeramente y tenga una textura suave.
  3. Cocción final de las albóndigas:
    • Regresa las albóndigas a la sartén, asegurándote de que queden bien cubiertas con la salsa de cebolla.
    • Cocina a fuego lento durante 15 minutos más, permitiendo que las albóndigas absorban todos los sabores de la salsa. Remueve ocasionalmente para evitar que se peguen.

Montaje y Servido:

  • Sirve las albóndigas calientes, bañadas en la salsa de cebolla. Puedes acompañarlas con puré de patatas, arroz o incluso con una guarnición de verduras asadas.
  • Disfruta de este delicioso y reconfortante plato, ideal para cualquier ocasión.

Sugerencias de Acompañamiento:

Las albóndigas en salsa de cebolla se sirven mejor con guarniciones que puedan absorber la rica salsa. Algunas ideas incluyen:

  • Puré de papas: La textura suave y cremosa del puré complementa perfectamente la jugosidad de las albóndigas.
  • Arroz blanco o integral: Para un acompañamiento más ligero, el arroz es ideal, ya que se impregna bien de la salsa de cebolla.
  • Verduras asadas: Zanahorias, calabacines o brócoli al horno aportan un toque saludable y de color al plato.
  • Pasta: Si prefieres una opción diferente, unas pastas como espaguetis o tallarines también pueden ser una excelente base.

Variaciones de la Receta:

  • Albóndigas mixtas: Puedes mezclar carne de res y de pollo para obtener una textura y sabor más equilibrado.
  • Versión sin gluten: Sustituye el pan rallado por pan rallado sin gluten o avena molida, y usa harina de maíz o arroz en lugar de harina de trigo para la salsa.
  • Albóndigas vegetarianas: Para una opción vegetariana, reemplaza la carne molida por una mezcla de lentejas cocidas y hongos picados, y utiliza caldo de verduras en la salsa.

Beneficios para la Salud:

  • Proteínas: Las albóndigas hechas con carne de res o pollo son una excelente fuente de proteínas, esenciales para la reparación y construcción de tejidos.
  • Cebollas: Las cebollas son ricas en antioxidantes y compuestos antiinflamatorios, lo que contribuye a la salud cardiovascular.
  • Equilibrio: Acompañadas con una guarnición saludable como verduras asadas o arroz integral, este plato puede formar parte de una dieta equilibrada y nutritiva.

Preguntas Frecuentes:

  1. ¿Puedo preparar las albóndigas con anticipación?
    • Sí, puedes formar las albóndigas y guardarlas en el refrigerador hasta por 24 horas antes de cocinarlas. También puedes congelarlas crudas y cocinarlas directamente desde el congelador.
  2. ¿Se puede hacer esta receta sin gluten?
    • Sí, solo necesitas sustituir el pan rallado y la harina por opciones sin gluten como avena molida y harina de maíz.
  3. ¿Cómo puedo hacer la salsa más espesa?
    • Si prefieres una salsa más espesa, puedes cocinarla un poco más tiempo a fuego lento o agregar una cucharadita adicional de harina.

Conclusión:

Las albóndigas en salsa de cebolla son un plato tradicional que nunca pasa de moda. Con su rica combinación de sabores y su versatilidad, es una receta perfecta para cualquier ocasión, desde una comida familiar hasta una cena especial. Además, es fácil de personalizar según las preferencias dietéticas, lo que la convierte en una opción accesible para todos. ¡Anímate a probarla y disfruta de un plato lleno de sabor y tradición!

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Albóndigas en Salsa de Cebolla: Receta Tradicional y Deliciosa


  • Author: Sofia

Ingredients

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Para las albóndigas:

  • 1/2 cucharadita de sal
  • 1 huevo
  • 1/2 taza de pan rallado
  • 500 g de carne molida (puedes usar carne de res, carne de pollo o una mezcla de ambas)
  • 2 dientes de ajo, picados finamente
  • 1/4 taza de perejil fresco, picado
  • 1/2 cucharadita de pimienta negra molida
  • 1/2 cucharadita de orégano seco
  • 2 cucharadas de aceite de oliva para freír las albóndigas

Para la salsa de cebolla:

  • 2 cebollas grandes, cortadas en rodajas finas
  • 2 cucharadas de mantequilla
  • 2 cucharadas de harina de trigo
  • 2 tazas de caldo de res (o caldo de pollo si prefieres un sabor más suave)
  • 1 hoja de laurel
  • Sal y pimienta al gusto

Instructions

Preparación de las albóndigas:

  1. Mezcla de la carne:
    • En un bol grande, coloca la carne molida de res o pollo (o una mezcla de ambas) y añade el huevo, el pan rallado, el ajo picado, el perejil fresco, la sal, la pimienta y el orégano.
    • Con las manos o una espátula, mezcla bien todos los ingredientes hasta que estén bien integrados. Es importante no mezclar en exceso para evitar que las albóndigas queden demasiado compactas.
  2. Formación de las albóndigas:
    • Con las manos ligeramente húmedas para que no se pegue la mezcla, forma pequeñas albóndigas del tamaño que prefieras. Generalmente, un tamaño de aproximadamente 3-4 cm de diámetro es ideal para que se cocinen de manera uniforme.
  3. Cocción inicial de las albóndigas:
    • En una sartén grande, calienta las 2 cucharadas de aceite de oliva a fuego medio-alto.
    • Coloca las albóndigas en la sartén y dora por todos lados, girándolas suavemente para asegurarte de que estén bien doradas y selladas por fuera. Este proceso debería tardar unos 7-10 minutos.
    • Una vez doradas, retíralas de la sartén y resérvalas en un plato.

Preparación de la salsa de cebolla:

  1. Cebolla caramelizada:
    • En la misma sartén en la que doraste las albóndigas (sin limpiarla para aprovechar los jugos y restos de la carne), derrite las 2 cucharadas de mantequilla a fuego medio.
    • Añade las cebollas cortadas en rodajas finas y cocínalas a fuego lento, removiendo de vez en cuando, durante unos 10-15 minutos. Las cebollas deben volverse suaves, doradas y caramelizadas. Este paso es crucial para lograr el sabor dulce y profundo de la salsa.
  2. Preparación de la salsa:
    • Una vez que las cebollas estén bien caramelizadas, añade las 2 cucharadas de harina de trigo y remueve constantemente durante unos 2 minutos. La harina ayudará a espesar la salsa.
    • Gradualmente, incorpora las 2 tazas de caldo de res o pollo, removiendo mientras lo haces para evitar que se formen grumos.
    • Añade la hoja de laurel y ajusta con sal y pimienta al gusto.
    • Cocina a fuego lento durante unos 10 minutos, o hasta que la salsa haya espesado ligeramente y tenga una textura suave.
  3. Cocción final de las albóndigas:
    • Regresa las albóndigas a la sartén, asegurándote de que queden bien cubiertas con la salsa de cebolla.
    • Cocina a fuego lento durante 15 minutos más, permitiendo que las albóndigas absorban todos los sabores de la salsa. Remueve ocasionalmente para evitar que se peguen.

Montaje y Servido:

  • Sirve las albóndigas calientes, bañadas en la salsa de cebolla. Puedes acompañarlas con puré de patatas, arroz o incluso con una guarnición de verduras asadas.
  • Disfruta de este delicioso y reconfortante plato, ideal para cualquier ocasión.

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